La competitividad laboral en la región Cusco mostró una leve mejoría al cierre del 2024, alcanzando un Índice de Competitividad Laboral (ICL) de 50.8 puntos sobre 100, según el informe “Desempeño del mercado laboral peruano – Resultados al 2024” elaborado por ComexPerú. Pese a esta mejora, la región descendió en el ranking nacional, pasando del octavo lugar en 2022 al décimo segundo en 2024, debido al lento progreso en beneficios laborales como pensiones y seguros de salud.
El ICL evalúa tres pilares: acceso al mercado laboral, entorno de trabajo y beneficios laborales. En este último, Cusco retrocedió del tercer al séptimo puesto, evidenciando un estancamiento en la cobertura de pensiones y aseguramiento en salud, mientras otras regiones avanzaron con mayor dinamismo.
“Ningún departamento alcanzó el puntaje máximo del ICL, porque todos deben mejorar en diversos aspectos. Incluso las regiones con mayor empleo formal enfrentan el reto de incrementar el empleo adecuado e impulsar la inserción laboral”, destacó ComexPerú.
Altos niveles de informalidad y exceso de horas laborales
El estudio revela que 617,134 trabajadores cusqueños estuvieron en condición de informalidad en 2024, lo que representa el 79.1% del total de puestos laborales en la región. Esta cifra, aunque ligeramente menor al 80.2% de 2023, sigue siendo una de las más altas del país.
Además, un 40.5% de los empleos en Cusco implica jornadas laborales superiores a las 48 horas semanales, afectando a más de 316,000 trabajadores. Esta es la segunda tasa más alta del país, reflejando una tendencia al alza respecto al 37.9% registrado en 2023.
Por otro lado, el acceso al mercado laboral también enfrenta desafíos. La inactividad involuntaria, que representa a personas que desean trabajar pero no pueden hacerlo por responsabilidades domésticas, afecta al 38% de la población económicamente inactiva, posicionando a Cusco como la cuarta región con mayor tasa en este indicador.
Salarios y cobertura de beneficios
En cuanto a remuneraciones, el salario promedio mensual en la región fue de S/ 1,618, superior al año anterior en S/ 202, aunque inferior al promedio nacional (S/ 1,766). Dentro de este promedio, el salario informal fue de S/ 1,186, mientras que en el sector formal alcanzó los S/ 2,881.
A pesar de esta mejora, más del 51% de los trabajadores cusqueños gana menos del salario mínimo legal (S/ 1,025), afectando a más de 400,000 empleos y superando el promedio nacional (42.4%).
En materia de pensiones, solo el 32% de los trabajadores está afiliado a un sistema previsional, lo que representa un leve retroceso frente a 2022 (32.7%). Este indicador posiciona a Cusco entre las cinco regiones que más retrocedieron en este aspecto. Según ComexPerú, mejorar la afiliación a pensiones es clave para fomentar la formalización laboral.
En contraste, la cobertura en salud alcanzó un alto 98.4%, impulsada principalmente por la afiliación al Seguro Integral de Salud (SIS).
La región Cusco, pese a mostrar algunos avances, enfrenta aún importantes retos estructurales en la generación de empleo formal, mejora de beneficios laborales y acceso equitativo al mercado de trabajo. El fortalecimiento de políticas públicas orientadas a estos aspectos será clave para avanzar hacia una mayor competitividad y bienestar laboral en la región.
