
La provincia de Espinar, ubicada en la región Cusco, se posiciona como un eje clave del desarrollo económico en el sur del Perú gracias a la combinación de su actividad minera y su destacado sector pecuario. Esta región, conocida por su producción de cobre y su importante aporte a la ganadería, representa una oportunidad para diversificar la economía y fomentar el crecimiento sostenible.
La Minería como Dinamizador Económico
La actividad minera, especialmente en la extracción de cobre, es uno de los pilares económicos de Espinar. Según datos del Ministerio de Energía y Minas (Minem), Cusco fue la cuarta región productora de cobre en 2022, concentrando el 9.9% del total nacional. Junto a las regiones de Apurímac y Arequipa, conforma el denominado “corredor minero”, responsable de cerca del 40% de la producción de cobre del país.
“La minería dinamiza diversos sectores económicos al generar demanda para empresas locales en servicios como alimentación, hospedaje, alquiler de equipos, lavandería, suministro de equipo de protección personal y combustibles,” explicó Patricio Lewis, investigador de la Red de Estudios para el Desarrollo (REDES). Estas actividades no solo generan empleo, sino que también mejoran la competitividad de las empresas locales, diversificando la economía y fortaleciendo la resiliencia de la región ante cambios globales.
Espinar: Líder en Producción Pecuaria
Además de su destacada contribución al sector minero, Espinar sobresale en la producción pecuaria. En mayo de este año, según el Boletín Mensual de Producción de Productos Pecuarios, la provincia lideró la producción de bovinos en la región Cusco, concentrando el 21.7% tanto en carne como en leche. También ocupa el primer lugar en producción de ovinos, con un 24.7% del total regional, y el segundo lugar en la producción de alpacas para carne, con un 25.5%.
Espinar también se consolidó como la provincia con mayor producción de leche fresca de vaca, aportando el 19.7% del total de la región. Estos logros destacan el potencial de la ganadería como motor de desarrollo, con beneficios tanto para la seguridad alimentaria como para el bienestar económico de las comunidades.
Inversiones y Capacitación: Claves para el Futuro
A pesar de estos avances, los expertos destacan la importancia de modernizar las prácticas de manejo y nutrición animal en la región. “El desarrollo pecuario en la región Cusco tiene un gran potencial. Para maximizarlo, es fundamental invertir en tecnología y capacitación para los productores, enfocándose en técnicas avanzadas y sostenibles”, afirmó Lewis.
Con un equilibrio entre la minería y el sector pecuario, Espinar tiene la oportunidad de consolidarse como un modelo de desarrollo integral en el sur andino. La clave estará en fomentar la colaboración entre sectores y garantizar que los beneficios lleguen a todas las comunidades de la provincia.