
En Cusco, más de 275 mil hogares carecen de conexión a Internet, lo que representa el 62% de las viviendas en la región, según datos recientes de la Encuesta Nacional de Hogares (Enaho). Esta situación coloca a Cusco como la octava región con menor acceso a Internet a nivel nacional, afectando directamente a más de 865 mil cusqueños.
La problemática se agrava en las zonas rurales, donde el 82% de los hogares no tiene acceso a Internet, y en viviendas en situación de pobreza, donde la cifra alcanza el 84%. Según Osiptel, los principales factores que contribuyen a esta realidad son el alto costo del servicio, la falta de cobertura y la ausencia de dispositivos como computadoras. Estas barreras no solo limitan el acceso a la información, sino también afectan oportunidades económicas, educativas y sociales.
“El Estado, en colaboración con el sector privado, debe garantizar el acceso equitativo a Internet, esencial para la educación, los negocios y otros sectores clave”, enfatizó César García, economista de la Red de Estudios para el Desarrollo (REDES). Según un estudio del Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC), un aumento del 10% en la cantidad de hogares con acceso a Internet puede incrementar el Producto Bruto Interno (PBI) nacional en un 2%, subrayando la importancia de la conectividad para el desarrollo económico.
Impacto educativo y desigualdades
La falta de conectividad también tiene un impacto profundo en el sistema educativo. En Cusco, el 49% de las escuelas no cuenta con acceso a Internet, lo que agrava las brechas de aprendizaje. Un estudio de Proinversión reveló que la implementación de proyectos de banda ancha aumentó la aprobación escolar entre un 18% y un 32% a nivel nacional entre 2015 y 2022. Sin embargo, este progreso no se refleja en Cusco, donde más del 70% de los estudiantes de 4° de primaria no alcanzó resultados satisfactorios en matemáticas según la Evaluación Nacional de Logros de Aprendizaje (ENLA) 2023.
“La carencia de acceso a Internet intensifica las desigualdades educativas, especialmente en zonas rurales. Sin una conectividad estable, se limita el acceso a contenidos y herramientas digitales esenciales para el aprendizaje”, destacó el especialista de REDES. En este sentido, iniciativas como “Conecta Selva”, que buscan llevar conectividad a establecimientos públicos, son fundamentales para cerrar estas brechas.
Propuestas para cerrar la brecha digital
Para reducir la desigualdad en el acceso a Internet, REDES plantea una serie de propuestas clave:
- Instalación de puntos de acceso gratuitos en zonas de alta pobreza.
- Distribución de dispositivos digitales como computadoras para hogares y escuelas.
- Programas de alfabetización digital dirigidos a poblaciones vulnerables, para maximizar el aprovechamiento de los recursos digitales.
Aunque el MTC ha lanzado la iniciativa “Plazas WiFi” para ofrecer Internet gratuito en zonas rurales, su alcance es limitado a solo once regiones del país, excluyendo a Cusco. Esta exclusión deja a miles de ciudadanos fuera de los beneficios de la conectividad, perpetuando la brecha digital.
Un llamado a la acción
La falta de acceso a Internet no solo representa una desventaja tecnológica, sino también un obstáculo para el desarrollo económico y social de Cusco. La conectividad es clave para impulsar la educación, fomentar el emprendimiento y garantizar la inclusión digital en una era cada vez más tecnológica.
En palabras de César García, “Es fundamental implementar un plan integral que expanda la cobertura y mejore la calidad del servicio, adaptado a las necesidades de cada región, utilizando tecnologías como la fibra óptica para evitar que la exclusión digital frene el desarrollo educativo y económico”.