Turismo en crisis: fallos en la gestión de reservas afectan al sector en Machu Picchu

La ineficiencia en el sistema de reservas turísticas de Machu Picchu pone en riesgo la recuperación del turismo en Perú, uno de los sectores clave de la economía nacional.

El ingreso de turistas nacionales y extranjeros a Perú continúa rezagado en 2024, manteniéndose por debajo de los niveles prepandemia. Este retraso, en un país rico en patrimonio cultural y natural, es visto como un reflejo de la falta de eficiencia y planificación del sector público.

El 19 de diciembre de 2024, se habilitó la venta de boletos para visitar Machu Picchu en las primeras fechas de enero de 2025 a través del portal oficial tuboleto.cultura.pe. Sin embargo, múltiples fallas técnicas en la plataforma generaron malestar entre turistas y operadores, quienes denunciaron errores en la interfaz y colapsos del sistema.

La problemática escaló aún más el 3 de enero de 2025, cuando el portal volvió a presentar fallos al abrir las reservas para el resto de enero. Esto llevó a largas colas físicas en oficinas de recaudación y generó críticas hacia la falta de modernización y preparación tecnológica en uno de los destinos turísticos más importantes del mundo.

Impacto en el turismo y la economía

La situación afecta directamente la experiencia de los visitantes y la imagen internacional de Perú como destino turístico. Según cifras recientes, el turismo receptivo apenas alcanzó una recuperación del 74.2% entre enero y noviembre de 2024, y se estima que cerrará el año en un 76%, muy por debajo de los niveles prepandemia. Más de un millón de turistas extranjeros aún están por recuperar frente a los registros de 2019, lo que genera preocupación en un sector que representa un pilar fundamental para la economía.

Críticas a la gestión estatal

Especialistas y actores del sector turístico han señalado que la decisión del Estado de revertir la tercerización de la venta de boletos fue un error. Además, critican el cronograma de reservas escalonadas, que limita la planificación anticipada de los viajeros internacionales. Muchos turistas planifican sus visitas con años de antelación, por lo que la falta de una política eficiente perjudica la competitividad del país frente a otros destinos globales.

Exigen soluciones inmediatas

Los operadores turísticos y asociaciones empresariales exigen que el Gobierno tome medidas inmediatas para modernizar y estabilizar la plataforma de reservas. También instan a replantear el modelo de gestión de las entradas a Machu Picchu, ya que los problemas técnicos y administrativos no solo generan pérdidas económicas, sino que afectan la percepción de eficiencia e institucionalidad del país.

El turismo, uno de los principales motores económicos del Perú, no puede seguir enfrentando estas barreras estructurales si se busca consolidar su recuperación y posicionar al país como un destino de clase mundial.